Desde hace muchos años se especula en que en La Casa Blanca habitan fantasmas que todos los días recorren sus pasillos. Hace 120 años ocurrió un hecho bastante particular que enmarcó los extraños hechos que atormentan la mansión. A raíz del hecho o de eso que podemos llamar “coincidencia” se presentaron muertes durante el mandato de todos los presidentes que son electos en años terminados en cero.
En 1840 fue elegido como presidente William Henry Harrinson, que asumió su mandato en 1841, pero un mes después murió por una fuerte neumonía como consecuencia de las fuertes heladas que se presentaron durante su discurso de posesión, el cual dictó sin ningún abrigo que lo protegiera.
El día de su muerte, el presidente Harrison marcó tres récords que son importantes mencionar. El primero, es el Presidente con el mandato más corto de la historia, pues solo duró 30 días. El segundo, es el discurso de posesión más largo de la historia (2 horas) y el tercero, el primero en fallecer en ejercicio de su gobierno.
Según cuenta la historia, el presidente Harrinson fue quien empezó una maldición que afectaría a otros seis presidentes a lo largo de 120 años. Esta maldición se le atribuye a un chamán indio, cuya tribu fue derrotada por él en la batalla Tippecanoe en 1811, mucho antes de llegar a ser presidente. Posterior a eso, Harrison había sido famoso como combatiente contra los nativos americanos.
“Les digo que Harrison morirá y cuando él muera ustedes recordarán la muerte de mi hermano Tecumsé. Ustedes creen que he perdido mis poderes, yo que hago que el sol se oscurezca y los pieles rojas dejen el aguardiente. Pero les digo que él morirá, y después de él, todo Gran Jefe escogido cada 20 años de ahí en adelante morirá, y cuando cada uno muera, que todos recuerden la muerte de nuestro pueblo”, anunció el profeta Tenskwatawa, hermano del gran guerrero Tecumse de la tribu amerindia de los Shawnee, cuando revivió el dramático final de la rebelión iniciada por su pueblo contra EE. UU.
Efectivamente, después de William Harrinson, los presidentes estadounidenses electos cada dos décadas fallecieron en su ejercicio de mandato.
Presidentes fallecidos
Abraham Lincoln, elegido en 1860, asesinado por un simpatizante de los sudistas. James Garfield elegido en 1880, también asesinado, en su caso por obra de un abogado al que había negado un cargo político. William Mckinley, en 1890, fue tiroteado por el anarquista Warren Harding en 1920, quien posteriormente murió debido a un ataque cerebrovascular. Franklin Roosevelt, en 1940, hemorragia cerebral y John F. Kennedy, en 1960, que fue víctima de un magnicidio. Todos elegidos en años terminados en cero, como afirma la leyenda.
Fin de la maldición
La maldición parece haber llegado a su fin cuando el presidente elegido en 1980, Ronald Reagan, sobreviviera.
Para los creyentes en la maldición, el Presidente sobrevivió gracias a su esposa y su superstición que la llevaron a acudir frecuentemente a astrólogos y de esta manera logró que le ayudaran a que su marido sobreviviera milagrosamente al atentado que sufrió a los pocos meses de subir al poder.
Por esto se habla de los 7 fantasmas que habitan la Casa Blanca y que muchas personas que caminan sus pasillos como presidentes y sus familiares han aceptado haber presenciado hechos de extraña naturaleza, también quienes han trabajado en reconstrucciones en la mansión afirman haber vivido la experiencia paranormal de sentir ruidos, puertas y hasta movimientos extraños sin ninguna explicación. Como si fuera poco, se habla de fotografías cuyas sombras extrañas han aparecido en ellas.