Durante la tarde de este jueves 20 de octubre, las autoridades de la ciudad de Medellín confirmaron que fueron capturadas seis personas señaladas por presunta responsabilidad en la desaparición de un niño de apenas seis años, el cual se encuentra desaparecido desde el pasado 21 de septiembre en el municipio de Remedios, Antioquia.
Sandra Patricia Cano, conocida como La Cacica, madre del menor; Damaris Pérez, abuela del menor; Fabio Carmona, padrastro del menor; un hombre conocido como alias Orejas y alias La Discípula, son los nombres de las personas capturadas por las autoridades. Todas serían familiares del niño, quien según las autoridades habría sido víctima de un hecho de satanismo.
En un principio, la madre del menor había indicado que el niño había desaparecido "tras ir a hacer una compra a la tienda", pero en vista de que no había pistas de su rastro, se asignó al caso un equipo especial de investigación integrado por personal de la Policía de Medellín y también de la Fiscalía.
El testimonio de la madre, que había afirmado que "comenzó a llorar" cuando vio que su hijo no aparecía y que la tienda a la que, al parecer, él se dirigiría, se encontraba cerrada durante ese día. La versión comenzó a levantar sospechas, las cuales cobraron especial fuerza cuando los investigadores encontraron que el niño, antes de ser reportado como desaparecido, ya llevaba más de una semana sin asistir a clases en su colegio.
Con el paso de los días, los vecinos en el sector de Remedios creyeron que el niño había sido encontrado sin vida dentro de su propia casa, lo que provocó que una multitud enardecida se abalanzara sobre la humanidad de la madre del menor, pues se creía que ella había cumplido un papel protagonista en la desaparición del niño.
Con esos antecedentes, y tras casi un mes de búsqueda, las autoridades procedieron este jueves a las capturas, con el propósito de dar más rápidamente con información que pueda permitir el descubrimiento del paradero del menor de seis años.
Según se conoció, los capturados deberán responder por concierto para delinquir, desaparición forzada, tortura, encubrimiento de tortura y lesiones personales con deformidad permanente.
De acuerdo con el medio paisa 'El Colombiano', el padrastro del menor habría convencido a los demás familiares de que el niño "estaba poseído por un ente demoníaco" y debían sacrificarlo.